El joven futbolista de 16 años firmó su primer contrato con el club de sus amores, en una jornada que marcó el inicio de su carrera profesional.
El sábado 21 por la mañana seguramente será recordado como un gran día en la vida de Jerónimo Gómez Mattar. El futbolista, nacido en Rosario y de tan solo 16 años, se convirtió en profesional en el club de toda su vida.
A primera hora, se lo vio llegar a las oficinas de administración del club con paso firme y respetuoso. Saludó a quienes estaban en la sala y se sentó en el lugar que le indicaron. Lo esperaban el presidente del club, Ignacio Astore, referentes del fútbol como Rubén Capria e Iván Borghello y otras autoridades, mientras que lo acompañaban su padre y sus hermanos, Joaquín (el mayor) y su hermano menor Julián, ambos también jugadores de Newell’s.
Con un semblante tranquilo, aunque visiblemente emocionado, Jerónimo estaba a punto de firmar el contrato que lo distingue del resto de los cientos de chicos que sueñan con ser futbolistas profesionales en Bella Vista día tras día.
Jerónimo, categoría 2008, se ganó su lugar a base de esfuerzo y destacadas actuaciones, tanto en Newell’s como en la selección Argentina. Desde los 4 años está en el club, incentivado por su hermano Joaquín, a quien menciona como su «ídolo».
A lo largo de su carrera, ha pasado por el predio de Malvinas y todas las categorías formativas del club. Actualmente es capitán de la 7ma división, donde juega como volante interno por la derecha, una posición que le gusta por su llegada al área y la posibilidad de convertir. Anteriormente, en Malvinas, jugaba de enganche y en gran parte de sus inferiores lo hizo como volante central. Su rendimiento destacado le permitió ser convocado a la selección juvenil sub 15 en primera instancia, y ahora es parte de la selección sub 17, donde también lleva la cinta de capitán. En diciembre del año pasado representó a la Argentina en el Mundial Juvenil de Indonesia (fue el goleador de la albiceleste) y ahora se encuentra en plena preparación para disputar el Sudamericano.
Jerónimo tiene muy claro lo que quiere y busca. Su profesionalismo no solo se refleja en su manera de hablar y entrenar, sino también en el cuidado que tiene fuera del campo de juego.
Tras la firma del contrato, tuvimos la oportunidad de hablar con él.
Te vemos acompañado por tu papá y tus hermanos. ¿Cuánto significa la familia para vos?
«Mi familia es un pilar fundamental porque siempre están cuando los necesito, tanto en las buenas como en las malas. Hacen todo por mí y por mis hermanos. Estamos muy unidos. Mi papá, mi mamá y mis hermanos, tanto los que están acá como el más grande que está en Estados Unidos jugando al rugby.»
¿Cómo se vive el deporte en tu casa?
«En mi casa se respira fútbol, se mira fútbol y se habla todo el día de fútbol. De los cuatro hermanos que somos, tres jugamos al fútbol, y mi papá también jugó de chico y sigue jugando con sus amigos. Se vive mucho el fútbol. Nos damos consejos, tratamos de ayudarnos entre nosotros y escuchamos, sobre todo, a mi viejo que tiene más experiencia, y a Joaquín, que ya tiene 19 años.»
El presidente del club, Capria y Borghello te expresaron su felicidad y te dieron confianza, ¿cómo recibís eso?
«Es una emoción enorme que el presidente me brinde su apoyo, y que referentes como el Mago e Iván, que salieron campeones con Newell’s, me apoyen. Es algo que el jugador necesita, sobre todo cuando uno está dando sus primeros pasos como yo. La felicidad es inmensa y me llena de orgullo que me puedan ayudar.»
¿A quién recordás en este momento?
«A mi familia y a mis amigos, que son los que siempre estuvieron. Mi familia íntima sabe el esfuerzo que uno hace día a día: faltar a juntadas, a cumpleaños, a comidas familiares. Siempre pensando en cuidarse, en irse a dormir temprano porque al otro día entrenás o tenés algún partido importante. Se lo dedico a ellos porque son los que me llevan a todos lados, los que están, los que te escuchan y te dan un abrazo cuando estás llorando. Para mí, ellos son los más importantes.»
¿Cómo te sentís después de la firma del contrato?
«Es algo hermoso, es lo que todo chico sueña de chiquito: firmar contrato con el club de tus amores. Es algo que no voy a olvidar nunca en la vida. Lo vengo buscando hace tiempo, por suerte se me dio y estoy súper feliz y emocionado. Ahora a meterle, porque esto es un paso, pero hay que seguir trabajando para llegar más alto.»
¿Qué sigue ahora?
«Ahora no hay que frenar. Si nos conformamos con esto, no vamos a llegar a nada. Hay que seguir, meterle a cada entrenamiento, a cada día. Esto es un detalle importante, que lo tengo bien presente, pero no hay que ponerse techo. Hay que ir para adelante siempre, con la camiseta rojinegra, que es la más linda de todas.»
¿Un sueño por cumplir en el club?
«Mi sueño, y creo que el de todos los chicos que están en el club, es debutar en la Primera en el Coloso lleno de gente. Y después hacer un gol, eso sería algo alucinante.»
